"a mi hija Marta Beatriz Prono"
Por Norma Piñeiro
ALA EN EL VIENTO POR MI AMOR ALZADA
Tu nombre y tu apellido, amigo mío,
forman parte de mi vida y de mi ser.
Llegaste y te quedaste libremente
aquí en mi casa, sin antes ni después.
Sufrimos los dos juntos fuertes vientos
que arrasaron sin piedad pasadas glorias
y cultivamos, con risas y guiñadas
la flor en el jardín de nuestra historia.
No obstante, amigo mío, aquí seguimos...
sintiendo en nuestro vínculo la unión
que nos puso a la par en el sendero
que desde ayer nos remitió hasta hoy.
Si miras a lo largo y a lo ancho
y al horizonte le pides su final,
no te responderá su línea permanente
pues siempre estará lejos, más y más.
Vuelve entonces tu rostro a mi mirada,
serenamente yo te escucharé.
Es probable que las sombras que tenías
se unan al horizonte que se fue.
© Alberto Peyrano